
La Vaquería Montañesa, come delicioso y orgánico fuera o en casa
La Vaquería Montañesa es uno de nuestros restaurantes favoritos de Madrid, ya que aúna platos exquisitos con una calidad como pocos.
Pertenece al Grupo Deluz y Compañía (el maravilloso Súper de los Pastores, La Carmencita, El Machi o Celso y Manolo), a los que admiro profundamente por su manera de hacer las cosas, por cómo cuidan de su equipo, y por conseguir siempre que además de comer rico, sepas lo que comes y de donde viene.
La Vaquería está ubicada en una antigua vaquería del centro de Madrid, reconvertida después en tienda de ultramarinos, para finalmente convertirse en ese restaurante donde puedes cuidarte, al mismo tiempo que disfrutas de la alta cocina.
El local es antiguo y acogedor. Decoración vintage, y con maravillosas fotografías que se encargan de romper sus centenarias paredes.

El servicio, impecable. Tan pendiente, y amable que te sientes en casa.
Miman la elección de sus proveedores, siempre ecológicos y nacionales, consiguiendo poner en valor la ganadería extensiva, agricultura ecológica y pesca responsable de España.
Son especialistas en pescados de la lonja de Santander, que compran ellos mismos todas las madrugadas, en verduras ecológicas de temporada de la huerta tudelana y en ternera ecológica de Siete Valles de Montaña, la primera cooperativa de ganaderos ecológicos de Cantabria, de la que forman parte.

Y ¿qué te superecomiendo que pruebes?
La pregunta sería mejor ¿qué no?…. 😋… Su chef Cristina Gallardo hace magia con cada plato.
Pero, entre nuestros favoritos sin duda se encuentran sus alcachofas crujientes con mayonesa de ajo negro, las anchoas de Laredo de la costera de 2016, con pimientos rojos doblemente asados, su caviar de Tudela, borraja salteada con huevo frito ecológico y sobre todo, su Salpicón de tomates de verano con tomate rosa, tomate kumato y tomate raff de la huerta de Clisol, en Almería….. Impresionante…
Y ¿Qué decir de sus postres? … todos deliciosos… pero creo que morirás por la tarta de choco crujiente al estilo del Hotel Crillon de París y por la cookie sin complejos, caliente y blandita con helado de vainilla y chocolate con receta del maestro heladero Fernando Sainz…
En resumen, productos de cercanía, sanos y exquisitos, traídos a tu mesa, junto con un fabuloso servicio, que consiguen que siempre apetezca volver.
Además, disponen de servicio para llevar, fantástico para esos días de sofá que te apetece algo saludable, buenisísímo y en casita …
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